Primeros días lo más lejos al nordeste. Parte II

Fin de semana en Horsens
De repente abro los ojos y tengo la habitación completamente iluminada... son las 6 de la mañana y acaba de amanecer OMG!!! mi ventanal está orientado al este y... estas persianas de láminas de metal no hacen nada aunque estén en posición vertical... habíamos quedado a las 8:30 en la Key office, no podía dormir y no tenía nada para desayunar... bueno sí, la candelilla... por momentos estuve tentado a abrirla.... pero no, pude contenerme, aun tengo... mi tesooooro!!! Total, que hice tiempo como pude enreando en internet y terminando de  organizar el cuarto.
Cuando llegó la hora nos fuimos con el compañero de piso de Noel, un Lituano que lleva aquí ya un tiempo y conoce algo el centro. Nos estuvo enseñando los diferentes supermercados donde podíamos comprar comida y la calle principal... pero al final acabamos en el Lidl, por ir la primera vez a un lugar conocido.
Y no es tan caro como me esperaba... compre pasta, arroz, algo de verduras y frutas, yogures, sal, orégano, alguna salsa de tomate (porque del tomate frito apis olvídate), aceite (de girasol porsupuesto), vinagre de módena, y productos de limpieza e higiene... un faire marca la bellota, champú, gel,... y todo por 250 coronas que viene a ser como 34 euros o así, y tenía comida, cena y desayuno para varios días.
Serían las 11, o así, cuando volví al piso, llevábamos toda la mañana andando, salvo el rato de la compra. Coloqué la compra en mis estantes y en mi hueco de la nevera, cuando decidimos solucionar el tema estrella del fin de semana, conseguir una bicicleta.
Lo primero fue preguntar... pero cuando lo hacíamos por un sitio donde comprarlas baratas o alquilarla el resultado era una carcajada... que las robásemos decían... esa posibilidad estaba, por supuesto, pero la última de la lista, a Benjamin, por aquel entonces mi único compañero, y en adelante Benji, le habían indicado en un mapa de horsens donde había una tienda de bicis mas baratitas o de segunda mano... maldita la hora... estuvimos buscándola el resto de la mañana... hasta las 3 de la tarde estuvimos dando vueltas... y según el mapa el sitio era una residencia del ancianos... asique nos dividimos y nos fuimos en buscas de tiendas... pero nada acabamos en casa haciendo unos espaguetis con chorizo Benji y yo...
Estaba reventao... yo estoy acostumbrado a mi AX, no a estar dando vueltas andado toda la mañana, y si a eso le sumas que había dormido poquísimo el resultado es una siesta de cuatro horitas... pero es mas, acabamos todos sobando hasta las 9 de la noche....
Cuando me levante me hice un bocata de jamón ton tomate.... los chichos que encontramos el día anterior de AT habían pillado ron blanco... digo matarratas... que para el caso es lo mismo, y como por estos lares no hay hielo pues nos ves a todos a chupitos de ronblanco con fantalimon... yo no pude probar el segundo... lo dicho, matarratas... hable con un estonio, un rumano, una polaca, un francés... si es es la proporción actual de la residencia... 1/5 si no más chica... la cosa iba bien, bueno regular... yo tenia las piernas destrozadas de haber estado andando todo el dia y llevar de pie casi 2 horas cuando aparecio el "casero", Stefan con el coche, estabamos en los patios internos de la residencia, con las largas puestas y con cara de pocos amigos, en pocos minutos el encuentro social se disolvió.
La gente comentaba salir en busca de algún pub, yo estaba dispuesto a ir pero mis piernas decían que con ellas no, con otras, asique yo al final me acabé yendo a sobar, poco a poco ire cogiendo forma en esto de andar... supongo.

A la mañana siguiente,se veía un día bastante despejado y soleado, al ver el correo recibí uno de un chico que estuvo aquí hace unos años, comentándonos donde había varias tiendas de bicis, entonces, teniendo en cuenta que como en cualquier parte del mundo al ser domingo iban a estar cerradas, nos fuimos en busca de estas para ver donde estaban y ver los escaparates. Echamos la mañana, y al volver a casa y tras comer, nos planteamos ir a la playa. Horsens esta levantada a lo largo de un golfo, y mi residencia está a un par de calles del puerto en lo mas adentro de este, asiqué tocaba andar, pero andar y andar y andar, creo que a unos 4 o 5 km estaba la p... playa... pero eso si ya que iba, yo me bañaba...hoooombre si me bañaba, a unos 12 o 13 graditos estaría el agua, sali con las piernas y la barriga colorá... pero me bañé.
En la ida pasamos por unos senderos, solo peatonales llenos de vegetación, y dejando a izquierda y derecha chalets y casas espectaculares, sin paredes, solo techo y ventanales... impresionantes. A un lado del sendero, vimos una bicicleta, la cual parecía abandonada, y en efecto lo estaba, porque tenía la orquilla rota, doblada hacia atrás, con la rueda delantera encajada. Aun así, Edu la cogió y rodando con la rueda de atrás la llevó de vuelta a la residencia.
Una vez en casa, me conecté un rato, duchita, sandwich de atun con tomate para cenar y nos fuimos al cuarto de un venezolanto que lleva aquí desde febrero, lo tiene muy bien montao, estuvimos un ratillo chapurreando y acabamos jugando al pro 2009, es lo que hay...
Y eso fue todo, después de este finde puedo decir que me conozco la mitad de Horsens, o por lo menos me la he pateado bien...