Uyuyuy ya casi un mes sin pasarme por aquí, ciertamente ya era hora... podría excusarme y decir cosas que son verdad, que he tenido un montón de trabajos por eso de que hemos llegado a la mitad del curso, como lo son la presentación de inglés, la de building renovation, un parcial "sorpresa" de macroeconomia,... y tareas para otras asignaturas, además de el vivir, que como poco pero como... pero es que además he estado dando señales de vida vía facebook, cosa que ha hecho que deje esto más de lado...La tercera semana de octubre, la pasada, no tuve clases, era el tan aclamado Autumn break, y por unas cosas y otras no tenía nada planeado, la gente se iban unos a Oslo, Londres, Praga,... así que a última hora hablé con mi amigo Xavi, de ISF, que está de Erasmus en Berlín, y surgió la posibilidad de ir a conocer la ciudad.
Al no tener tiempo de antelación para comprar los billetes y que es semana de vacaciones, los precios de los aviones se habían disparado, no obstante encontré una combinación un tanto rara pero asequible, del miércoles 13 al jueves 21 y me lancé a la aventura.
El miércoles por la mañana, después de clase volví a casa, terminé la maleta y comí, a las 14:29, tenía el tren que me llevaba a Copenhague... y digo esto porque cuando fui a comprar el billete el hombre me dijo que no había billete para las dos y media, lo había para las dos y veintinueve... si, un poco absurdo, pero es que estos daneses llevan muy bien el tema de la puntualidad, el tren llegaba cuando tenía que llegar y salía cuando tenía que salir. Disfruté mucho el viaje en tren, solo, me puse un par de clases de ingles en el mp3 y me dedique a ver el paisaje. Cuando me monté el sol estaba "encima" nuestra, pero a lo lejos... y al llegar, a eso de las seis menos veinte, ya se estaba poniendo, también a lo lejos claro... A diferencia de los coches el tren tiene un tramo que pasa por debajo del agua en el segundo puente... pero el túnel es opaco así que simplemente ves oscuridad. Pero impresiona mucho cuando pasas por encima del mar.Como cogí un tren que me llevaba directamente al aeropuerto, fue bajarme de él, subir las escaleras y ver de qué terminal salía mi vuelo... como suele pasar con las compañías de bajo coste, estaba a tomar por... osea en la terminal 3. Pasé la aduana sin problemas... bueno sí, los vaqueros empiezan a quedarme algo grandes y al quitarme el cinturón se me iban cayendo... y tras la aduana, como les suele pasar también a las compañías de bajo coste, el vuelo salía con retraso... y la puerta de enlace... de las últimas por supuesto!!! como tenía tiempo, me lo tomé con calma...
El vuelo bien, eran 45 min... Al llegar a Berlín, algo desorientado me acojoné.... bastante, Xavi no estaba allí esperándome y todo venia en Alemán... Xavi me dio mal su número del móvil y no podía llamarle... uff Nada nada, pasaron 15 min, estuve preguntando en información acerca del metro y para que me mirara el teléfono a ver si sabían que dígito me sobraba... y en ese momento apareció Xavi, que había tenido problemas para llegar al aeropuerto en bus.
Nos acercamos al metro, que estaba a las afueras del aeropuerto recorriendo un pasillo al aire libre.. y nos tiramos un rato delante de la maquina expendedora de billetes debatiendo cual sería la mejor opción para esa semana. al final cogimos un sencillo y para casa.
Resulta que en estos países del norte explotan mucho la confianza de la gente, y si estos sistemas los aplicaran en España... por supuesto que no funcionarían, respecto a los transportes, tu compras tu billete (en mi caso compré el de una semana, era el mas económico) y lo picas en una máquina que te sella la hora en la que comienzas a utilizarlo... y con ese billete ya picado puedes coger cualquier transporte en la ciudad, ya sea autobús, metro o tranvía, y si pasa un revisor se lo enseñas y ya está... se ahorra muucho tiempo en tener que estar picando el billete cada vez que vas a coger un medio de transporte, es muy cómodo... pero en toda la estancia en Berlín nadie me pidió el billete... que hubiera empezado a hacer... no comprarlo, si somos así. La multa si te pillan sin billete son 40 euritos, también hay que decirlo.
Esa noche, al llegar a casa, Xavi me estuvo explicando que sus compañeros hace una cosa que se llama... no me acuerdo en ingles, pero en español era algo como surfear en contenedores... suena mal, lo sé, pero tiene su lógica, y dicen que es legal, el tema es que se acercan a supermercados como lidl o aldi y cogen comida que han tirado y que está en perfecto estado, pero que por algún motivo menor no pueden vender... cosa que aquí en Dinamarca lo que hacen es rebajarlo hasta valores irrisorios... en esto los alemanes están más atrasados.
No obstante, a mi en primera estancia tampoco me hizo mucha gracia así que nos fuimos a cenar a un kebab,... bueno mejor dicho a un Turco, que la cosa cambia bastante. Resulta que el kebab se inventó en Berlín, según me explicaron, a los alemanes les encanta meter la comida en pan e ir comiendo por la calle así que un día a uno se le ocurrió y tiró pa'lante la idea, tanto es así, que no hay una calle en Berlín que no tenga un kebab o turco, sin contar las multinacionales de comida rápida y similares como lo son Mcdonals o Burriking, y demás Currywurst, ChinaBox, SushiBox,... y tíos en la calle vendiendo perritos calientes. (esto es lo que mas me gusto de Berlín). El caso es que los restaurantes turcos en Berlín no llevan la carne de los troncos a los que estamos acostumbrados en España... sino que es carne "buena"... mejor veis la foto.
Vimos un poco el barrio y volvimos para casa.
El jueves fue día de turismo, el que más hicimos nos levantamos a una hora prudente, y cogimos el metro para ir a Alexanderplatz y desde allí atravesamos la ciudad hasta llegar a la puerta de Branderburgo, el recorrido fue impresionante, en un primer momento nos paramos en los puestos que había en Alexandeplatz con cosillas típicas berlinesas, pero como todo lo que es para turistas muy caro, acabando el recorrido tomándonos un higadito de pollo asado con cebollas y patatas que estaba riquísimo, y un perrito de los que te vende un tío a pie... y luego pues nos pusimos a caminar viendo la torre de la tele, lo más alto de la ciudad, la fuente de Neptuno, impresionante con todos los detalles que tiene, la catedral antigua, con recuerdos de las balas de la 2ªGM, pasamos por la isla de los museos, pero no entramos en ninguno, y atravesamos Unten der Linden, un bulevar precioso en pleno otoño, hasta llegar a la puerta de Branderburgo. En el único museo que entramos fue en el de la Mercedes, que es pequeño pero espectacular.
En el Starbucks de Branderburgo nos tomamos un Frapuccino de fresa grrr.... y seguimos paseando hasta el.. capitolio? no me acuerdo muy bien, el caso es que al menos por fuera, la cúpula era inmensa e impresionante, al igual que la cola que había que hacer para verlo por dentro así que nos fuimos. Y también porque tenía que acabar un trabajo que tenía que enviar al día siguiente.
Ya os seguiré contando... que todavía queda la semana entera!!
Mas fotos en :
http://picasaweb.google.com/jterronv/AutumnBreakInBerlin?authkey=Gv1sRgCNj0-Jy87qjSag&feat=directlink
Y llegaron las 1000 entradas!!
ResponderEliminary te quierooooooooooooooooooo
ResponderEliminarBueno y la 2ª?
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